Malasia, rica en materiales naturales y habilidades de tejido tradicional, se ha convertido en un jugador clave en la industria de la cesta hecha a mano. Ofreciendo productos diversos y ecológicos, servicios OEM personalizables y precios competitivos, los fabricantes de Malasia sirven a los mercados globales con autenticidad y calidad, lo que hace que el país sea un destino de abastecimiento principal para cestas hechas a mano.